Este museo fue concebido para expresar el dinamismo del cine a través de formas libres que evocan los momentos de máximo drama y acción de algunas de las películas más trascendentales del cine actual. En su interior se ha dado particular énfasis a una medianera que funge como el eje central desde el cual se despliegan las salas de exhibición temporal y permanente. 

Al ser el cine el elemento clave de este museo se cuidó la integración de una sala IMAX fácil de acceder para todo el púbico independiente del acceso a las salas de exhibición con el fin de acercar al público en general a la cultura del cine. 

Aprovechando la topografía del lugar se ubicaron las oficinas, talleres de restauración y servicios en un semisótano que se incrusta en la roca volcánica presente en el terreno y al mismo tiempo se maximiza el uso de la luz natural al integrarlo con las explanada un nivel arriba. 

Finalmente el museo integra una serie de terrazas que permiten tener vistas panorámicas de la ciudad universitaria. El lenguaje deconstructivista del museo se relaciona con la arquitectura contemporánea del Museo Universitario de Arte Contemporáneo que se ubica en las inmediaciones, al tiempo que se ve atenuado e integrado en el paisaje boscoso gracias al diseño de explanadas y espacios verdes generados para los propios visitantes de ciudad universitaria.